La pérdida de elasticidad y firmeza en la piel es un proceso natural que ocurre con el paso del tiempo. Con el avance de la edad, el contorno facial se ve afectado, dando lugar a la aparición de flacidez y líneas de expresión. Afortunadamente, existen diferentes opciones para combatir estos signos de envejecimiento y redefinir el contorno facial. Uno de esos tratamientos es la técnica de los hilos tensores, una alternativa eficaz y mínimamente invasiva que ha ganado popularidad en los últimos años.
¿Qué son los hilos tensores?
Los hilos tensores son filamentos de polidioxanona (PDO) que se insertan en la piel a través de pequeñas incisiones. Estos hilos actúan como soporte estructural, elevando y tensando los tejidos faciales. El material con el que están fabricados los hilos es biocompatible y reabsorbible, lo que significa que se disuelve de manera natural en el organismo con el tiempo.
Procedimiento y resultados
El procedimiento de colocación de hilos tensores se realiza de forma ambulatoria y generalmente no requiere de anestesia general. El médico especialista realiza pequeñas incisiones en la zona a tratar y mediante una aguja guía, introduce los hilos debajo de la piel. Una vez colocados, los hilos se tensan y anclan, lo que produce un efecto inmediato de reafirmación y elevación del tejido.
Los resultados de los hilos tensores se aprecian de manera inmediata, aunque es importante tener en cuenta que pueden existir ciertos efectos secundarios como edema, hematomas o sensación de tirantez. Estos efectos suelen desaparecer en unos pocos días. A medida que los hilos se reabsorben, el organismo estimula la producción de colágeno, lo que favorece una mejora continua en la firmeza y tonicidad de la piel.
Áreas de aplicación
Los hilos tensores pueden ser utilizados para tratar diferentes áreas del rostro, incluyendo:
- El tercio medio facial: mejillas y pómulos.
- El tercio inferior facial: mandíbula y cuello.
- Las cejas y la frente.
- El contorno de labios.
Duración de los efectos y mantenimiento
La duración de los efectos de los hilos tensores puede variar dependiendo de la persona y de las características individuales de su piel. Aunque su efecto es temporal, generalmente los resultados pueden durar entre 12 y 18 meses. Para mantener y maximizar los efectos, se recomienda seguir las indicaciones del médico especialista, llevar una rutina de cuidado facial adecuada y realizar sesiones de mantenimiento cuando sea necesario.
¿Quiénes son candidatos ideales para los hilos tensores?
Los hilos tensores son una opción adecuada para hombres y mujeres que deseen mejorar el contorno facial sin recurrir a cirugía o tratamientos invasivos. Sin embargo, es importante consultar a un médico especialista para determinar si este tratamiento es el más adecuado para cada caso en particular.
Costo y accesibilidad
El costo de los hilos tensores puede variar dependiendo del país y de la clínica donde se realice el procedimiento. En promedio, los precios pueden oscilar entre X y X en España. Es fundamental buscar un centro especializado y confiable que cuente con profesionales cualificados para garantizar la seguridad y eficacia del tratamiento.
Preguntas frecuentes
- ¿Los hilos tensores son dolorosos?
- ¿Existen riesgos o efectos secundarios asociados a los hilos tensores?
- ¿Cuándo se pueden retomar las actividades normales después del tratamiento con hilos tensores?
El procedimiento con hilos tensores suele ser bien tolerado por los pacientes, aunque se puede experimentar algún grado de incomodidad durante el proceso de inserción de los hilos.
Los hilos tensores son un procedimiento seguro, pero al igual que cualquier tratamiento estético, existen posibles efectos secundarios como hematoma, edema o infección. Es importante acudir a un profesional cualificado y seguir todas las recomendaciones pre y postoperatorias.
La mayoría de los pacientes pueden retomar sus actividades normales y aplicar maquillaje al día siguiente del tratamiento. Sin embargo, es recomendable evitar actividades físicas intensas y exposición solar directa durante los primeros días.
Fuentes de referencia
- Sociedad Española de Medicina Estética (SEME)
- Clínica Dermatológica Internacional