La herida en el ombligo, conocida también como onfalitis o infección del ombligo, es una condición común que puede afectar tanto a recién nacidos como a adultos. En este artículo, examinaremos detalladamente las causas, los síntomas y los tratamientos disponibles para esta lesión umbilical.
Causas
Existen varias causas que pueden llevar a la aparición de una herida en el ombligo. En los recién nacidos, es común que esta lesión se produzca debido a una infección bacteriana causada por la falta de higiene adecuada durante el cuidado del cordón umbilical. Además, ciertas condiciones médicas subyacentes, como una hernia umbilical o un quiste, también pueden aumentar el riesgo de desarrollar una herida en el ombligo.
En el caso de los adultos, las causas más frecuentes de una herida en el ombligo están relacionadas con el uso de piercings o la realización de cirugías abdominales. Los piercings mal realizados o no adecuadamente cuidados pueden infeccionarse, lo que resulta en una herida en el ombligo. Por otro lado, después de una cirugía abdominal, la herida en el ombligo puede ser una complicación postoperatoria.
Síntomas
Los síntomas de una herida en el ombligo pueden variar según la gravedad de la lesión. En general, los síntomas más comunes incluyen enrojecimiento, hinchazón y dolor en la zona afectada. Además, puede presentarse pus o secreción con mal olor, lo cual indica una infección. En casos más graves, la herida en el ombligo puede causar fiebre y malestar general.
En los recién nacidos, es importante estar atentos a cualquier cambio en el cordón umbilical, como un aumento en la presencia de sangre, secreción o mal olor. Estos síntomas pueden indicar una infección del ombligo y requieren atención médica inmediata.
Tratamiento
El tratamiento de una herida en el ombligo varía dependiendo de la causa y la gravedad de la lesión. En casos leves, se pueden utilizar medidas de cuidado local, como la limpieza regular con agua y jabón suave, así como la aplicación de una pomada antibiótica. Sin embargo, es fundamental seguir las indicaciones de un profesional de la salud, especialmente en el caso de los recién nacidos.
En casos más graves, puede ser necesario recurrir a la administración de antibióticos orales o intravenosos para tratar la infección. Si la herida en el ombligo está relacionada con un piercing, es posible que se requiera retirar el adorno y administrar medicamentos tópicos específicos.
Prevención
Para prevenir la aparición de una herida en el ombligo, es importante seguir ciertas medidas de higiene y cuidado. En el caso de los recién nacidos, se recomienda limpiar el cordón umbilical con una solución antiséptica suave y mantenerlo seco. Además, es fundamental lavarse las manos antes de manipular el ombligo del bebé.
En el caso de los adultos, es esencial realizar una higiene adecuada después de realizarse un piercing en el ombligo. Esto incluye mantener la zona limpia y seca, y evitar la exposición a agua contaminada, como piscinas o jacuzzis. Además, es importante seguir las instrucciones de cuidado proporcionadas por el profesional que realizó el piercing.
Conclusiones
En resumen, una herida en el ombligo puede ser una condición molesta y potencialmente peligrosa si no se trata adecuadamente. Tanto en recién nacidos como en adultos, es fundamental seguir las medidas adecuadas de cuidado e higiene para prevenir su aparición. Ante la presencia de síntomas o signos de infección, siempre es recomendable consultar a un médico para obtener un diagnóstico preciso y un tratamiento adecuado.
Referencias:
1. Wounds International. (2015). Umbilical wound care in newborn infants. Retrieved from: https://www.woundsinternational.com/resources/details/umbilical-wound-care-in-newborn-infants
2. Ferri, F. F. (2018). Ferri's Clinical Advisor 2018 E-Book: 5 Books in 1. Elsevier Health Sciences.